El empleo de alambradas con espinos, armas químicas, ametralladoras y artillería de grueso calibre dejaba indefensa a la infantería en los ataques a las lineas enemigas.
Entre las innovaciones destacaron:
Lo emplearon los británicos por primera vez en 1916, pero fueron infrautilizados por su escasa maniobrabilidad y por el desacertado manejo de unidades.
Su función fue muy escasa, y solo se usaba para destruir trincheras y como infantería, no para atacar directamente.
En la primera contienda mundial se usaron escasamente los aeroplanos, a modo de prueba. Pero estos tuvieron mucha mas fama en la Segunda Guerra Mundial, donde las principales tareas que ejercieron fueron, de reconocimiento, ataque a la retaguardia, lanzamiento de bombas a las trincheras o combate en formaciones de caza.
La flota inglesa jugó un papel importante en debilitar la resistencia Alemana. Bloqueó estrechamente los puertos Alemanes y los Austríacos. A mediados de 1917 el empleo de cargas de profundidad, campos de minas, barreras de redes, junto a la utilización de mecanismos de rastreo submarino y la organización de una cantidad de naves de guerra juntas, disminuyeron la efectividad de los sumergibles Alemanes.
Se trataba de buques de gran tonelaje y fuerte defensa, dotados de artillería de grueso calibre. Si bien los alemanes hicieron todo lo posible por igualar la potencia de la marina británica, dedicaron sus mayores esfuerzos a desarrollar el arma submarina que asestó hasta 1917 duros golpes a la navegación de superficie.
Su calibre y precisión fueron incrementándose a lo largo del tiempos, hasta llegar a maquinas gigantescas. Se utilizó como apoyo a la infantería y mayoritariamente se concentraron en altas cantidades con el fin de romper las líneas de trincheras. Se destaco el cañón antiaéreo (servía para la defensa de aviones en tierra o mar) Y para la lucha cercana se crearon toda una serie de armas ligeras como el lanzagranadas*, el mortero** o el lanzallamas.
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Ametralladora: Cuando la Guerra comenzó, las ametralladoras eran bastante primitivas, y demasiado pesadas como para transportarlas libremente por soldados, pues cada una pesaba entre treinta y sesenta kilos sin monturas ni provisiones. Las ametralladoras se perfeccionaron comenzando por el modelo Maxim. Más tarde se fabricó el modelo Browning, el más utilizado. Por su gran efectividad en las trincheras, derrotando con facilidad grandes formaciones de atacantes.